FESTIN DE DUELO

FESTÍN DE DUELO.  Interminables promesas para encantar a inocentes ya dejan pocas dudas de su falsedad, y despiertan el rechazo de  víctimas timadas, en aumento a diario.  En la práctica ha resultado un atraco a sangre fría, con absoluto desprecio del daño causado a los pueblos.  Así complacen las exigencias del manifiesto comunista, donde se ordena  la distribución de riquezas que fueron ganadas con esfuerzos de

otros, pasando por alto, a conveniencia mutua del estafador y del estafado, que "quien no pone el sudor de su frente" para  ganar el sustento, también quedarâ por fuera de cualquier reparto creíble".

Tanto en el campo como en la ciudad abundan historias de gente sencilla que escoge un camino independiente sin limosnas de nadie, sufriendo privaciones por años, consecuentemente dispuestos a la mayor defensa de sus pequeñas propiedades.

El infortunio del agricultor Franklin Brito en Venezuela en 2010 demostró la vileza de esos procesos de la corrupción, en primer lugar con el robo de bienes flotando en el aire de ciudadanos sin rostros. Las expropiaciones a reconocidos privados sigue por lo general hasta anotarse la ruina general de los estados. Va de manera paralela el silencio atorado en el pecho y la voluntad mayoritaria represada de reponer la justicia para castigar a los culpables de la mayúscula tragedia.

Las fiestas de golilleros duran poco a falta de complicidades internas y externas, desaparecidas por la coacción oficial en el  intento venezolano fallido de 2002,  que aún pesa a allegados de los que abortaron la renuncia a la presidencia del militar golpista Hugo Chávez. Entonces él saldría del cargo por permitir disparos de armas de fuego a una protesta pacífica de ciudadanos, aunque recibiría auxilio conveniente del general Raúl Baduel, muerto posteriormente en injusta prisión por purgas chavistas. Desagradecidos y amorales al descubierto burlaron frenos a saqueos y marramucias para aferrarse a la manguanga del poder el tiempo que fuera posible, a imitación de la dictadura cubana con 66 años y la venezolana con 26, ni que expresar de China, Korea del Norte o Rusia.

"¡ACABA DE PASAR...!" es el cabezal de una breve publicación de oportunidad producida por Josué D. Fernández, https://comunicadorcorporativo.blogspot.com/. Estaremos pronto de regreso con otros acontecimientos.

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